Nunavut es una tierra casi inexplorada al norte (muy al norte) de Canadá. Este vasto territorio, que ocupa una quinta parte del país, es el hogar de paisajes helados y solitarios, una fauna única en el mundo y un pueblo aislado del resto de la civilización y que casi ha desaparecido por completo: los inuits, o como muchos les conocen, los esquimales. El viaje a Nunavut ofrece una clase de aventura que muy pocos lugares del planeta pueden igualar. Desde el grandioso espectáculo de las auroras boreales en el crudo invierno hasta el sol de medianoche durante el verano. Nunavut es un destino donde la naturaleza en su estado más salvaje domina cada aspecto de la vida cotidiana.

Explorar Nunavut es adentrarse en el corazón del Ártico y sentir lo que muy pocos viajeros alguna vez sintieron. Donde cada paso se siente como una travesía hacia lo desconocido, pero a la vez profundamente conectado con la historia y las costumbres de sus habitantes. El aire fresco y el sobrecogedor silencio del Ártico hacen de este territorio un auténtico paraíso para aquellos que buscan una experiencia irrepetible que no puede compararse con nada de lo antes vivido.
Explorando Baffin y Ellesmere: Las islas gigantes del Ártico

Una de las grandes maravillas de Nunavut son sus islas. Entre las más notables se encuentra la Isla de Baffin, la más grande de Canadá y la quinta del mundo.

Su vasto territorio ofrece desde fiordos imponentes hasta el glaciar Sirmilik, un parque nacional conocido por su impresionante fauna, incluyendo narvales, osos polares y focas.

El Parque Nacional Auyuittuq, ubicado en la misma isla, alberga el Monte Thor, que presume de tener la caída vertical más alta del mundo, un reto que atrae a escaladores y aventureros de todo el mundo.

Más al norte, en la Isla de Ellesmere, se encuentran algunos de los paisajes más remotos del planeta.

Este lugar es famoso por el asentamiento de Alert, el más septentrional del mundo, y por su proximidad al Polo Norte, lo que lo convierte en un destino único aunque prácticamente inaccesible.
Alert: El lugar habitado más al norte del mundo

Como ya hemos mencionado, en Nunavut se encuentra Alert, un asentamiento permanente ubicado en la Isla de Ellesmere, que es el lugar habitado más al norte de la Tierra. Situado a solo 817 kilómetros del Polo Norte, este lugar es un sitio clave para investigaciones científicas y meteorológicas. Aquí, la vida se define por las duras condiciones árticas, donde las temperaturas pueden bajar drásticamente, y los inviernos se caracterizan por la oscuridad total.

Sin embargo, su relevancia estratégica y su papel en la comprensión del cambio climático hacen de Alert un lugar vital en el mapa global. Sin embargo, si estás pensando en viajar a Alert, me temo que lo tendrás muy difícil. Ya que Alert es un asentamiento militar canadiense y el acceso está supercontrolado y regulado, por lo que un turista que quiera viajar hasta Alert por su cuenta encontrará series dificultades para hacerlo.

Si planeas una aventura por esas tierras árticas, probablemente tendrás que tratar con las autoridades canadienses, quienes quizás no estén muy entusiasmadas con los visitantes que solo quieran hacer excursiones rápidas. El asentamiento civil más al norte de Canadá es Ny-Ålesund en Svalbard, pero desde lo que sé, generalmente se accede en paradas de crucero o consiguiendo un trabajo como investigador.
La fauna de Nunavut: Narvales, osos polares y más

El Ártico canadiense también es un verdadero paraíso para todos los amantes de la fauna salvaje. En Nunavut, es posible observar algunos de los animales más icónicos del Ártico. En las costas del Parque Nacional Sirmilik en la Isla de Baffin, los narvales, conocidos como los «unicornios del mar«, nadan en manadas, ofreciendo una de las vistas más espectaculares del planeta. También se pueden encontrar osos polares, caribús y focas anilladas a lo largo de toda la costa y en las áreas más remotas de la región.

Además, las aguas alrededor de la Isla Ellesmere y el Inlet Cunningham en la Isla Somerset se llenan de ballenas beluga durante los meses de verano. Miles de estas ballenas blancas se reúnen para mudar su piel en las “cálidas” aguas del Ártico, creando un espectáculo natural difícil de olvidar.
Parques nacionales y maravillas naturales de Nunavut

Nunavut cuenta con algunos de los parques nacionales más impresionantes de Canadá. Por ejemplo, el Parque Nacional Auyuittuq, en la Isla de Baffin, ofrece una de las rutas más exigentes del planeta; hablo del Pang Pass, un antiguo corredor inuit de 95 kilómetros de recorrido que transcurre por medio de glaciares y montañas cubiertas de hielo. Este parque nacional también es famoso por el Monte Thor, una de las montañas más impresionantes del mundo.

Por otro lado, tenemos el Parque Nacional Sirmilik, con su diversidad de fauna, y el Paso del Noroeste, una legendaria ruta marítima, forman parte de las maravillas naturales de Nunavut, ofreciendo actividades como kayak, esquí y expediciones a lugares arqueológicos antiguos.
El arte y la cultura Inuit en Nunavut

La cultura inuit es el alma de Nunavut. En la comunidad de Cape Dorset, también conocida como la capital mundial del arte inuit, el West Baffin Eskimo Co-Operative ha sido un centro vital para el arte local por más de 50 años.

Aquí, los artistas inuits crean tallados, grabados y obras de arte en piedra que son codiciadas por coleccionistas de todo el mundo. Las tradiciones artísticas de Nunavut no solo son una expresión cultural, sino una forma de vida que conecta a los inuits con su tierra y su historia.
Canadá es un país que impresiona en todos los sentidos. Si Nunavut te ha parecido increíble, espera a ver todo lo que te espera en Saguenay, o planifica una ruta por los mejores lugares donde ver ballenas. Hagas lo que hagas, seguro que regresas a casa con la maleta llena de recuerdos que nunca olvidarás.